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Lladró's creations are extraordinarily evocative. They
recreate the sweetest and most intense feelings of our lives
and suspend them in time and space thanks to the enduring
beauty of porcelain.
Bridal carriage is inspired by one of those very special moments
that mark a before and after, and that change us forever. A
newly wed couple parade their love in a horse-drawn carriage.
Dressed in their elegant bridal clothes, she leans her head on
his shoulder in a relaxed placid gesture after the much-awaited
marriage. He looks back at her with a tender gaze which
contrasts with the serious expression of the driver, discreet and
dapper in his top hat.
Like all High Porcelain creations, Bridal carriage is also a
creative display, successfully meeting a challenge that puts
the skills and experience of the best Lladró artists to the
test. One of the greatest achievements in this sculpture is
to have been supported by itself, in other words, without the
buttocks (support sticks) or the porcelain base on which a
work of this kind usually needs to rest. This requires a highly
precise assemblage of all the pieces in order to guarantee
the perfect balance, making it a tangible expression of skill
and technical prowess.
Decoratively speaking, it is an extraordinarily rich work with
an infinity of details. The bride's dress with its pleats, the
lace on the bodice and the embroidery on the skirt, provides
excellent examples of the filigrees Lladró artists are capable of
producing. Equally of note are the garlands on the carriage, the
bride's bouquet and the flowers in her veil. The piece comes
with a dark wooden pedestal highlighting the brightness of this
light-colored piece.
The carriage is a version of the late 19th century open-top
Victoria. Everything about this elegant carriage is faithfully
reproduced: the metal elements of the rims and wheels, the
stitching on the sack, the blanket at the driver's feet, the border
of the trunk, the horse's bridle, painted with enamels in three
colors (red, blue and aged leather tones). The horse's coat is
also worked with different enamels to successfully render
all its various nuances. Hour after hour of painstaking work
went into making this creation a work of art worthy of a truly
unforgettable day.
Las creaciones Lladró poseen un extraordinario poder evocador.
Recrean las sensaciones y los sentimientos de los momentos más
dulces e intensos de nuestra vida y los conservan con nosotros
gracias a la belleza imperecedera de la porcelana.
Carruaje de novios se inspira en uno de esos hitos que definen un
antes y un después y nos cambian para siempre. Una pareja de
recién casados pasea su amor en un coche de caballos. Ataviados
con sus hermosos trajes, ella reclina la cabeza sobre su brazo en un
gesto de placidez después del esperado enlace. Él le devuelve una
mirada tierna que constrasta con la seriedad del cochero, elegante
y discreto, con su sombrero de gala.
Como todas las creaciones de Alta Porcelana, Carruaje de novios
es también una exhibición de destreza y técnica, la superación de
un reto que pone a prueba la experiencia de los mejores artistas de
Lladró. Uno de los méritos fundamentales de esta escultura es el
hecho de que la pieza esté elaborada “al aire”, es decir, sin el puntal
artificial o la repisa de porcelana sobre la que habitualmente
descansa una pieza de estas proporciones. Esta característica exige
un preciso ensamblaje de todas las piezas para que el conjunto
mantenga un perfecto equilibrio, lo que convierte su ejecución en
un alarde técnico.
A nivel decorativo, es una obra extraordinariamente rica, llena
de multitud de detalles. El vestido de la novia, con los pliegues y la
puntilla en el corpiño y el bordado en la falda, son un ejemplo de las
filigranas que son capaces de realizar los artistas de Lladró. A estos
detalles se unen las guirnaldas de la carroza, así como las flores del
tocado y del ramo de la novia. Esta creación está acompañada de
una peana de madera oscura, lo que hace que destaque todavía
más la luminosidad de esta pieza de colores claros.
El carruaje está inspirado en una versión descubierta del modelo
Victoria de finales del siglo XIX. Todo está reproducido fielmente
en esta elegante carroza: los elementos metálicos de las llantas,
el metal de las ruedas, los pespuntes del saco, la manta que tiene
el cochero a sus pies, la cenefa del baúl, los arreos, pintados con
esmaltes en tres tonalidades (rojizo, azulado y en un tono de piel
envejecida). La superficie del caballo también está trabajada
con diferentes esmaltes para lograr registrar todos los matices de
su pelaje. Horas y horas de minucioso trabajo que hacen de esta
creación la gran obra que se merece un día inolvidable.
BRIDAL CARRIAGE / CARRUAJE DE NOVIOS