Born in Okinawa and trained in Milan, Kensaku Oshiro designs from the balance
between two cultures: the reflective stillness of Japan and the precision of
Italian design. Since 2015, he has led his own studio, following collaborations
with renowned international brands such as Poltrona Frau and Boffi.
Each of his designs begins in serene contemplation. His work breathes a silent
elegance that needs no explanation. Every line is a contained decision; every
texture, a presence shaped with care. Nothing is missing, nothing is in excess.
As in "iki", beauty lies in the exact gesture—in what is sensed more than what
is shown.
For Kensaku Oshiro, design is an act of subtlety: a way of inhabiting the world
with calm, with intention, with respect.
Nacido en Okinawa y formado en Milán, Kensaku Oshiro diseña desde el
equilibrio entre dos culturas: la pausa reflexiva de Japón y la precisión del
diseño italiano. Desde 2015 dirige su propio estudio, tras haber colaborado con
reconocidas marcas internacionales tales como Poltrona Frau o Boffi.
Cada uno de sus diseños nace de una contemplación serena. Su obra respira
esa elegancia silenciosa que no necesita explicación. Cada línea es una decisión
contenida; cada textura, una presencia pensada. Nada sobra, nada falta. Como
en el "iki", la belleza está en el gesto justo, en lo que se intuye más que en lo que
se muestra.
Diseñar, para Kensaku Oshiro, es un acto de sutileza: una forma de habitar el
mundo con calma, con intención, con respeto.
“No intento recrear la naturaleza.
La contemplo, la acojo—
hasta que queda solo su memoria, silenciosa y verdadera.”
A LINE BETWEEN WORLDS